jueves, 13 de mayo de 2010

Investigan a orden católica española por supuesto abuso sexual

Por CIARAN GILES
MADRID (AP) _ Un tribunal del sur de España investiga denuncias de abuso sexual en perjuicio de residentes discapacitados en un hogar administrado por una orden católica, informó la propia diócesis.

José Juan Jiménez, vocero de la diócesis de Córdoba, dijo que fueron informados por funcionarios judiciales sobre la investigación hace un mes y que han cooperado plenamente.

Jiménez declaró el miércoles a The Associated Press que el caso involucra posible abuso sexual y maltrato de pacientes en un hogar para lisiados operado por los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca en Córdoba.

El diario El País informó que dos miembros de la orden comparecieron el miércoles ante un tribunal cordobés y fueron declarados sospechosos. Agrega que se les ordenó mantenerse alejados del centro.

Jiménez aseguró no tener detalles de lo que ocurrió en el tribunal y los llamados a la corte y a la orden religiosa no obtuvieron respuesta.

La diócesis de Córdoba emitió una declaración en la que establece que, desde que recibió las denuncias, actuó "con el bienestar de las víctimas en mente y tomando las medidas necesarias para aclarar la responsabilidad que hubiere".

El País y otros medios publican que, en otro caso separado, un trabajador laico de ese hogar está preso desde hace varios meses acusado de abusar sexualmente de una paciente, mientras que la orden religiosa pagó a la familia de la víctima 5 mil euros (6 mil 350 dólares) como indemnización.

España se había visto generalmente libre de denuncias por abusos sexuales como las que conmovieron a otros países como Alemania e Irlanda, pero éste sería el segundo caso de una orden religiosa en España este mes.

El 4 de mayo, la orden de carmelitas descalzos dijo que comunicó a la fiscalía denuncias de que uno de sus monjes abusó de un menor hace años en el pueblo de Burriana.

La prensa española publicó que era la primera vez que una agrupación católica actuó en respuesta a una exhortación reciente del papa Benedicto XVI de que las autoridades eclesiásticas reporten a las autoridades las denuncias de abusos.

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