Por FEDERICO QUILODRAN
SANTIAGO DE CHILE (AP) _ La jerarquía de la Iglesia Católica guardó silencio el viernes sobre una nueva denuncia de abusos sexuales que habría cometido un sacerdote ya jubilado y se limitó a prometer que este fin de semana entregará un documento a los párrocos del país.
El presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Alejandro Goic, y el cardenal arzobispo de Santiago, monseñor Francisco Javier Errázuriz, se reunieron durante una hora con el presidente Sebastián Piñera, al término de la cual ambos prelados rehusaron comentar la última situación que afecta a un religioso.
Las revelaciones sobre los supuestos abusos que habría cometido hace 20 años el ex párroco Fernando Karadima de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, en el sector elegante de la comuna de Providencia, estallaron el miércoles, al día siguiente que la jerarquía católica pidiera perdón por los 20 religiosos implicados
en casos de ultrajes. Cinco de los sacerdotes implicados ya fueron condenados por la justicia, mientras que los otros son investigados por la justicia civil o por la justicia canónica.
El cardenal Errázuriz declaró el viernes, ante los requerimientos periodísticos, que este fin de semana se entregará una carta a los párrocos del país en la que se expondrá la posición de la Iglesia. ``Sobre este tema yo le voy a escribir una carta a los párrocos y, por lo tanto, a las comunidades cristianas. Este fin de semana ustedes lo van a conocer, y por eso no quisiera pronunciarme más
sobre el tema'', dijo.
La reunión con Piñera, que había sido concertada antes que estallara el escándalo, tuvo por objeto discutir con el mandatario las consecuencias del terremoto del 27 de febrero y la solicitud de la iglesia de un indulto general a condenados por delitos menores con motivo del bicentenario en septiembre de la independencia nacional.
En el caso reciente de Karadima, de 79 años, el cardenal Errázuriz dijo que si bien hay una investigación de la iglesia desde hace años, sugirió dudas sobre las imputaciones al destacar que cinco obispos fueron formados por el sacerdote y ellos
elogian a su maestro.
Además de la investigación canónica, el jueves un fiscal inició la indagación judicial del caso y tomó declaraciones a dos de los cuatro denunciantes de Karadima, uno de ellos un médico. Ese denunciante afirmó que los abusos los habría cometido el párroco cuando la víctima tenía 17 años. Otro de los supuestos abusados habría tenido también esa edad. Solo dos denunciantes fueron identificados, James
Hamilton y Juan Carlos Cruz.
El abogado Juan Pablo Bulnes, defensor de Karadima, descartó los cargos contra el religioso y señaló que se trataría de un complot de personas que se han aunado para acusar al sacerdote. Pero no precisó detalles.
"Creo que estas acusaciones no tienen fundamento y que la víctima es el padre (Karadima) que ha sido injustamente acusado cuando él le prestó un servicio transparente y muy leal a estas personas y a cientos de miles de otras personas'', dijo Bulnes en declaraciones a radio Cooperativa.
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